En todo el país aún existe publicidad política que es, ni más ni menos, contaminación visual.
Por Jorge Giraldo Acevedo
Fusagasugá, Cundinamarca jgiraldoacevedo@yahoo.es
Definitivamente son muchos los políticos que no han retirado la publicidad que aún está en forma principal en las vías públicas de las ciudades, carreteras del país, en ventanas de residencias; también los mensajes en pasacalles, vallas, muros, postes y hasta en vehículos.
De los políticos ganadores y perdedores, en la última jornada electoral del 29 de octubre, ahora todos los colombianos esperamos que procedan a limpiar nuestras ciudades de tanta publicidad; en todo el país aún existe publicidad política que es, ni más ni menos, contaminación visual.
Ya han transcurridos varios días después de las elecciones y las ciudades colombianas presentan la más grave contaminación visual. Es indiscutible que el problema es consecuencia de la gran cantidad de políticos aspirantes a los cargos de gobernadores departamentales, alcaldes municipales, diputados a las Asambleas, concejales y ediles.
Concluida la jornada electoral, es inexplicable que exista publicidad proselitista. Por aplicación de disposiciones legales, como la Ley 140 del año 1 984 y normas de los Concejos Municipales, se procura la descontaminación visual y del paisaje y la integridad y protección del medio ambiente
Si los políticos no hacen la descontaminación ahora, tendrán que intervenir las autoridades y más exactamente la Policía Ambiental sancionando a los infractores.
Por simple lógica de buen comportamiento ciudadano y más aún por parte de la clase política, “el que ensucia o contamina está en la obligación de limpiar”.
