Presidente Petro insta a Lula da Silva a reflexionar sobre conveniencia de permitir exploración de hidrocarburos en la Amazonía.
El Presidente Gustavo Petro invitó a su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, a reflexionar sobre la conveniencia de la exploración y explotación de hidrocarburos en la Selva Amazónica, al cierre del encuentro preparatorio denominado «Camino a la Cumbre Amazónica», realizado en Leticia, con el objetivo de definir algunos de los parámetros que se llevarán a la cita que se celebrará en agosto próximo en Belém de Pará, en el país vecino.
“Hoy somos conscientes de que las selvas del mundo son pilares climáticos fundamentales. La Cuenca Amazónica es la tercera. Si se quita este pilar, como las columnas de Hércules, la humanidad se derrumba. Se nos impone, entonces, un cambio de pensamiento”, aseguró el Presidente.
Y, dirigiéndose a su homólogo brasileño, presente en la reunión, añadió: “El reto de proteger la vida pasa por discusiones dificilísimas, por ejemplo ¿vamos a dejar explorar hidrocarburos en la Selva Amazónica? ¿a entregarlos como bloques de exploración? ¿está ahí la riqueza o está ahí la muerte de la humanidad? Una decisión que tendríamos que tomar en común”.
El mandatario colombiano aclaró que si bien cada nación es soberana para hacer uso de sus recursos naturales, la crisis climática y el deterioro de la Cuenca Amazónica demanda el asumir acciones radicales y una transformación del actual sistema económico mundial.
“Cada país ha vivido de estos recursos, la mayoría. Nosotros hemos vivido del petróleo y del carbón durante los últimos 40 años. Si cambiamos, entonces ¿de qué vamos a vivir? Podemos vivir del cerebro, de la ciencia, de otro tipo de desarrollo, abriendo caminos de unidad, del turismo, de la bio-economía”, enfatizó.
Ambos presidentes participaron, en la sede de la Universidad Nacional de Leticia, en la plenaria de cierre de la reunión técnico científica de la Amazonía, un espacio con representantes de ocho naciones y miembros de comunidades indígenas e investigadores sobre el deterioro ambiental de la Selva.
Dicha instancia pretendía acordar una estrategia que garantice la integridad del ecosistema amazónico, detener la acción y el uso destructivo de la tierra y evitar que se alcance el punto de no retorno, como respuesta frente a la crisis climática.
“La razón hoy nos dice -a través de la ciencia- que hay que transformar todo el sistema económico mundial; que ese es el reto. Ahí está la revolución (…) Creímos que el progreso era la destrucción del árbol, creíamos que eso era subdesarrollo, hoy el planteamiento es salvar esos bosques para salvar la vida”, añadió.
“Hay otro tipo de desarrollo que es proteger la vida. Transformar ese sistema económico en función de la vida es la revolución de los tiempos de hoy. De la Amazonía debe partir la revolución de la vida”, concluyó Petro que destacó la reducción del 76 % en deforestación de la Amazonía colombiana durante su Gobierno.
Cabe recordar que en diferentes escenarios internacionales el Presidente Petro ha venido expresando su preocupación por el acelerado proceso de deterioro de la Selva Amazónica, por acción del hombre y también por el mismo calentamiento global.
El Jefe de Estado colombiano plantea establecer un fondo multilateral, “que sea capaz durante 20 años, de financiar a las fuerzas sociales, campesinas, agricultoras, en general personas humildes, que son hoy el agente de destrucción de la selva. Transformarlos en una fuerza positiva que significa pagarles mensualmente servicios ambientales por cuidar y dejar crecer la selva amazónica”.
Al Presidente Petro lo acompañaron el canciller Álvaro Leyva; el director del Dapre, Carlos Ramón González; la ministra de Ambiente, Susana Mohammad; la ministra de Agricultura, Jennifer Mojica, y el embajador de Colombia en Brasil, Guillermo Rivera.
Entre tanto, el Presidente Lula da Silva estuvo acompañado de la primera Dama del país, Rosângela Lula da Silva; el canciller Mauro Viera; la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva; la ministra de Pueblos Indígenas, Sônia Guajajara; el ministro Jefe de la Secretaría de las Comunicaciones, Paulo Pimienta, y Celso Amorim, asesor Especial de Presidencia de la República.