Principales apuestas del #GobiernoDelCambio tras la aprobación del PGN en las plenarias del Congreso.    

405,6 billones de pesos será el monto del Presupuesto General de la Nación, al cual le dieron luz verde tanto el Senado como la Cámara de Representantes luego de una larga jornada de discusión en el Capitolio que, al final, no requirió conciliación, pues no se hicieron cambios a la propuesta radicada. Por tanto, la ley pasará directamente a ser firmada por el presidente Gustavo Petro.

67 votos por el sí logró en el Senado, mientras que 144 alcanzó en la Cámara el proyecto presentado por el Gobierno, con el que buscará financiar sus programas y políticas de 2023. El valor aprobado aumenta en un 15,1 % frente al presupuesto de 2022 y representa el 27,7 % del Producto Interno Bruto (PIB).

“Celebramos mucho esta victoria del Gobierno. (…) Hace un aumento significativo en programas sociales, programas a favor de la paz, reforma agraria, educación, vivienda, social, salud y, además en el debate con los parlamentarios, una inversión en vías terciarias”, destacó el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, a la salida de la plenaria.

Desde esa cartera, aseguran que “ayudará a fortalecer la resiliencia de la economía colombiana frente a eventos internacionales adversos”, pues fortalecerá las cadenas de producción y de suministro, al tiempo que se desarrollará una transición energética y una “búsqueda de la paz total”.

Así las cosas, para el siguiente año estos sectores tendrán mayor asignación presupuestal (sin servicio a la deuda):

Educación, $ 54,8 billones.

Salud y protección social, $ 50,2 billones.

Hacienda, $ 48,7 billones.

Defensa y Policía, $ 48,3 billones.

Trabajo, $ 37,9 billones.

Inclusión social y reconciliación, $ 17,8 billones.

(Además: Salario mínimo 2023: comerciantes calculan incremento de 13 %).

Unos $ 78 billones estarán destinados para cubrir el servicio de la deuda pública. En concreto, según las cuentas del Ministerio de Hacienda, $ 24 billones irán para la deuda externa y $ 58 billones llegarán para la deuda interna.

El Gobierno tiene planeadas varias metas, entre ellas, sobresalen el fortalecimiento de las transferencias monetarias para la población vulnerable con el fin de luchar contra el hambre, subsidios de energía y gas natural de hasta el 50 % sobre el valor, alivio de pagos para quienes deben créditos educativos al Icetex, mejoramiento del acceso a las telecomunicaciones en zonas apartadas y el cofinanciamiento del déficit de los sistemas de transporte masivo.

Vía EL TIEMPO