Por: Óscar Alberto Acosta Arias
La época de pandemia que vive Fusagasugá, por el “Covid-19”, obligó a que el estilo tradicional que se lleva dentro de una vida normal de los fusagasugueños, se modificara y se ajustara a la regulación y normatividad emitida por los entes nacional, departamental y replicada por el ente municipal, con ajuste al sector económico, a las costumbres, e idiosincrasia de los lugareños.
Por supuesto esto ha dificultado que la mayoría nos adaptemos al cambio tan fuerte de costumbres, afectando nuestro comportamiento personal y social, y nuestra economía, mas cuando a estas alturas se siente el cansancio y fatiga del aislamiento, plasmado mediante un encierro en casa y sin vida social, parte fundamental de nuestra vida y entorno, fuente de nuestra estabilidad emocional y comportamiento.
Las autoridades, en cabeza del alcalde con el apoyo del sector salud fundamentalmente la IPS Hospital San Rafael, y la Clínica Belén, Medsalud, Medicare, etc., como parte esencial en este proceso, y en justo reconocimiento han logrado mitigar de una manera amplia los efectos de la pandemia en la población fusagasugueña, con fortalecimiento de la infraestructura hospitalaria, controles de ingresos a nuestra ciudad, con procesos de desinfección, con identificación de focos, con georeferenciacion de los mismos, con pruebas rápidas, cercos epidemiológicos, con tamizaje, con trazabilidad, con el respectivo acompañamiento y aislamiento a las personas y familias alcanzadas por el virus.
Las autoridades civiles y el sector salud, han dirigido todos sus esfuerzos a enfrentar la pandemia, en planes de contingencia que modificaron totalmente la planeación que se tenía establecida para el año 2020.
Era imposible que el virus no llegara a Fusagasugá, al igual que al Hospital San Rafael como la institución de salud más representativa que fue constituida para atender las patologías de los enfermos independientemente de cuál sea y entre ellas el “Covid 19”, y de por sí, a sus funcionarios en la ejecución de sus labores asistenciales se les elevó la probabilidad de contagio, por el alto grado de transmisibilidad que tiene el coronavirus.
Hago este escrito de reflexión, en reconocimiento de los esfuerzos de las autoridades civiles y del sector salud del municipio de Fusagasugá, basado en los direccionamientos y las soluciones que han planteado y ejecutado para enfrentar la pandemia del “Covid 19”
Por eso los fusagasugueños no debemos ser ajenos en nuestra participación para controlar la pandemia, ni ser parte del problema, sino parte de la solución para enfrentarla, cumpliendo con la normatividad y regulación establecida por las autoridades, colocando nuestra disciplina y nuestra estadía en casa, para que el coronavirus no se mueva con nosotros.
