El Congreso de la República aprobó un proyecto que le brinda garantías laborales a los vendedores ambulantes de todo el país y que se ha sido denominado como «Ley empanada».
La iniciativa, que pasa a sanción presidencial, establece que las autoridades no podrán imponer multas a los ciudadanos por adquirir productos en la calle y tampoco podrán restringir la comercialización de los mismos.
El senador Carlos Guevara, autor de la ley, explicó: “Se busca proteger a todos los vendedores informales del país. Hoy existen 1’200.000 vendedores en el espacio público ganándose la vida en largas jornadas y sin ningún tipo de protección social”.
Y agregó: “Lo que buscamos es permitirles que puedan seguir usufructuando el espacio público y a su vez, de manera organizada con las entidades territoriales y la Policía, poder seguir haciendo sus actividades sin detrimento de la actividad formal”.
El proyecto también tiene un componente pensional, ya que le permitirá ahorrar a los vendedores ambulantes.
“Busca garantizar un ahorro para la vejez, porque parte de lo que ellos van a pagar para el uso del espacio público, la gran mayoría irá para un fondo que podrá ser utilizado cuando ya tengan cierta edad”, añadió.
Asimismo, se incentivará la formalización laboral de estos trabajadores. “Se van a garantizar programas de formación y capacitación para hagan tránsito a la legalidad y permitir que haya confianza legítima que la Corte Constitucional ha señalado para ellos”, indicó Guevara.
Además, se establece que los alcaldes del país deben armonizar la ley con un protocolo de intervención del espacio público con las autoridades de Policía.
Este proyecto nació luego del escándalo que se generó en el país tras la imposición de una multa de 800.000 pesos a un ciudadano que compró una empanada en la calle. El país, como era de esperarse, se indignó con lo sucedido con un humilde joven.