Exalcalde Hortúa lo regañó, y trabajadores le exigen trato digno. También el exsecretario de Educación defiende su buen nombre.

Por Alejandro Castro Guerrero

El mandatario de los fusagasugueños William García Fayad, hombre pensionado de la Asamblea de Cundinamarca, viudo y padre de dos hijos, economista que supera los 70 años, y aparentemente en buenas condiciones de salud, quien no debería estar pasando las duras y las maduras al frente de la Administración Pública; empieza a debilitarse moral y políticamente tras haber prestado su nombre para ser apalancado por recursos económicos de varios ilustres ciudadanos que ahora supuestamente se trenzaron en peleas por el botín burocrático, y de contratos, convirtiendo al alcalde en el hazmerreír de sus contradictores. Porque en la Ciudad Jardín no hay oposición cívica, ni democrática. A puertas de elecciones los politiqueros de oficio sacan lo peor de sí para enlodar personas con la ayuda de pseudoprofesionales del marketing digital, porque ni siquiera existen comunicadores con énfasis en opinión pública que con altura generen debates en torno a las gravísimas – y eternas – problemáticas del territorio.

El joven abogado exalcalde Jhon Jairo Hortúa Villalba, quien ha sido calificado por el equipo político del señor García Fayad como un rotundo fracaso para Fusagasugá, después de conocer pormenores de su mandato y verificar contratación, y supuestos malos manejos de la cosa pública; le salió al paso al alcalde tras escucharlo en rueda de prensa culpándolo a él de parte de – su precariedad – (la de García Fayad) en la función pública.

Jairo Hortúa lo regañó

@WilliamGarciaF lleva 6 meses en el cargo y sigue culpando a la administración anterior, a sus propios secretarios, a los empleados de carrera y a los contratistas de sus errores. Esta administración basa su discurso en ser la antagonista de mi gobierno, olvidando que quien debe gobernar ahora es usted.

Fusagasugá decidió volver a creer, no volver al pasado. Deje de usarme como enemigo discursivo para evitar enfrentar sus propias decisiones. Mi administración ya terminó; la suya apenas comienza. Por el bien de Fusagasugá, asuma sus responsabilidades y comience a gobernar.

¿CORRUPCIÓN EN LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN DE FUSAGASUGÁ?

García Fayad, deja entrever que Óscar Javier Rodríguez Díaz secretario de Educación sale de la Alcaldía de Fusagasugá por corrupto. Rodríguez también le sale al paso respondiéndole, así:

Y, para completar, los sindicalizados de la Alcaldía de Fusagasugá se sumaron a exigirle respeto, y trato digno al septuagenario alcalde:

Así como el entendimiento y diálogo para el buen desarrollo de las relaciones laborales y un TRATO DIGNO, se establezcan mecanismos de prevención de conductas que puedan tipificarse como acoso laboral y establecer un procedimiento interno, conciliatorio y efectivo para superar estas situaciones en nuestro entorno laboral.

En este orden de ideas, solicitamos su valiosa intervención en estos asuntos de tal manera que juntos trabajemos con buen trato en materia de empleo con el objeto de eliminar cualquier maltrato a los empleados de carrera administrativa, por lo que reafirmamos el trato digno para todos los trabajadores de la alcaldía y sus entes descentralizados y nuestro compromiso de servicio, honestidad, responsabilidad, valores que rigen nuestro Código de Integridad con el fin de eliminar cualquier discriminación de este aspecto.

De conformidad con lo anteriormente expuesto, le solicitamos se retracte de las afirmaciones que realizó en medios de comunicación donde menoscaba el buen nombre de los empleados públicos y trabajadores oficiales que durante décadas han hecho parte de la Alcaldía Municipal de Fusagasugá y sus Entes Descentralizados y han contribuido a la construcción y desarrollo de este municipio.

Conclusión

William García Fayad debería no prestarse para más ridículos en lo público. Dar un paso al costado y salir por la puerta grande antes que sea demasiado tarde. Ya se filtró que sus patrocinadores de campaña y los hijos – del alcalde – andan metiendo las narices por todas partes, y esa dinámica lo llevaría al buen señor que posa de decente, al borde de un … colapso. Las cifras no le favorecen: feminicidios, asesinatos de menores, suicidios, atracos a mano armada, robos de vehículos, desempleo, problemas en la movilidad, ocupación del espacio público, pobreza y miseria, etc…

Y como si fuera poco, crisis en el gabinete y ruido de corrupción no solo en EMSERFUSA ESP.

Preferimos que haya elecciones atípicas, y verificar muy bien la escogencia de un candidato no untado de recursos, presuntamente mal habidos, para que no lleguen a hacerse de lo suyo y el municipio siga: manga por hombro.