Por solicitud de la Fiscalía, un juez envió este domingo a la cárcel a Ómar Ambuila, su esposa Elba Chará, Emilson Moreno y Gustavo Adolfo Rivas por presuntos hechos de corrupción en la Dian, en Buenaventura. La hija de Ambuila, Jenny Lizeth Ambuila, también recibió medida de aseguramiento.

Todos habían sido detenidos bajo cargos de testaferrato. Dentro de las múltiples actividades detectadas por la Fiscalía están millonarias transacciones en dólares a Estados Unidos, compra de costosos accesorios, viajes y fiestas, que no pudieron ser justificadas por los capturados.

Desde hace por lo menos un año la Fiscalía junto a agencias de los Estados Unidos les seguían la pista para descifrar el esquema de corrupción que estaría en cabeza de dos funcionarios de la Dirección de Aduanas, quienes habrían permitido el ingreso ilegal de toneladas de mercancía por el puerto de Buenaventura.

Ómar Ambuila, jefe del Grupo Interno de Trabajo de Control de Carga de la Dian en la terminal marítima, y Emilson Moreno Granja, funcionario de la misma dependencia, presuntamente aprovecharon sus cargos para manipular los contenedores y alterar el contenido o permitir que cruzaran sin ningún control aduanero.

A cambio de su ilícito actuar, estas dos personas y otros cómplices habrían recibido millonarios dividendos que se ocultaron a través de la constitución de empresas fachada o fueron girados a sus familiares para que adquirieran bienes y servicios que superarían su capacidad económica.

“Estaría demostrado que los dos funcionarios no tenían salarios superiores a los seis millones de pesos, sin embargo, registraron ingresos y compras por montos muy superiores de los que nunca ha existido claridad sobre su origen”, explicó el delegado de la Fiscalía ante el juez de garantías.

En el curso de la investigación llamó la atención que la hija y esposa de Omar Ambuila gozaban de una vida de comodidades y así lo mostraban a través de las redes sociales. Ya en la verificación de sus movimientos financieros se constató que no desempeñaban actividad económica que soportara los bienes y la vida social que ostentaban.

En cuanto a Jenny Ambuila, hija del funcionario de la Dian, se conoció que estudiaba en una de las más reconocidas y prestigiosas universidades en Estados Unidos, viajaba constantemente, recibía giros en dólares y asistía a los más famosos festivales de música electrónica en el mundo.

Las investigaciones determinaron que esta joven sería la propietaria de un vehículo Lamborghini de color rojo que habría sido comprado en Miami, al igual que una camioneta Porsche blanca. El rastreo financiero evidenció que por el Lamborghini se pagó algo más de 300 mil dólares, es decir, al menos 1.000 millones de pesos colombianos que supuestamente salieron de la venta de una casa en el norte de Cali (Valle del Cauca), en 2016.

“Este negocio fue desvirtuado por los investigadores, ya que se verificó que para el mencionado año Ambuila no tenía bienes a su nombre”.

Jenny Ambuila, hija del funcionario de la Dian, se conoció que estudiaba en una de las más reconocidas y prestigiosas universidades en Estados Unidos.

Fuente: El Colombiano