Un artículo publicado por la BBC, que cita al portal Mosaic, da cuenta de la preocupación de varios expertos a nivel mundial por la aparición de cuatro nuevas enfermedades de transmisión sexual y ellas son las siguientes:
– Neisseria meningitidis
La Neisseria meningitidis conocida también como llamada meningococo puede llegar a causar una meningitis invasiva, infección que es mortal para el cerebro y las membranas protectoras de la médula espinal.
Esta enfermedad alarma a los profesionales de la salud por su resistencia a los antibióticos y según estudios, la uretritis causada por la N. meningitidis en hombres la fuente de contagio fue sexo oral.
Existen cinco tipos de N. meningitidis que son responsables de la mayoría de infecciones que se registran en todo el mundo. Por fortuna, existen dos vacunas que, combinadas, pueden ofrecer cierta protección.
– Mycoplasma genitalium
Esta bacteria es una de la más pequeñas que se conocen y está ganando una reputación enorme y preocupante.
La Mycoplasma genitalium actualmente infecta aproximadamente a el 1% y 2% de las personas, en especial a adolescentes y adultos jóvenes.
La infección por M. genitalium normalmente no presenta síntomas, pero puede llegar a imitar a una clamidia o gonorrea.
– Shigella flexneri
Esta bacteria se transmite por contacto directo o indirecto con las heces humanas.
Dicha infección causa calambres estomacales severos y brotes de diarrea llena de sangre y mucosidad.
Esta enfermedad se asocia más comúnmente con niños pequeños y con personas que viajan por algunos países de ingresos bajos y medios.
Científicos comenzaron a documentar casos de esta enfermedad en hombres homosexuales y bisexuales en la década de los 70.
– Linfogranuloma venéreo (LGV)
Es causada por por cepas inusuales de Chlamydia trachomatis y puede provocar una «infección terrible», según lo manifestó Christopher Schiessl, un médico de la clínica One Medical en el vecindario de Castro, en San Francisco.
Esta enfermedad empieza produciendo un grano, ampolla o úlcera genital temporal y luego invade el sistema linfático del cuerpo.
Al igual que con la clamidia, esta bacteria puede aumentar el riesgo de contraer el VIH.
Tratar esta enfermedad puede requerir el uso de antibióticos, como la doxiciclina, durante aproximadamente tres semanas.
Fuente : BBC Mundo