El Gobierno del Cambio reglamentó los espacios de diálogo con el campesinado. Esta norma, incluida en el Plan Nacional de Desarrollo, consolida la implementación de las políticas públicas agropecuarias.

 La ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Martha Carvajalino, firmó junto con la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, y el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, este fi de semana el decreto que reglamenta la Comisión Mixta Nacional para Asuntos Campesinos, que será el escenario de interacción entre el Estado y el campesinado colombiano.

Este es un paso crucial para la consolidación de la Reforma Agraria y la Reforma Rural Integral, porque permite que las organizaciones campesinas aporten sus experiencias para la construcción de las políticas públicas. 

“Firmamos el decreto que regula la conformación de la Comisión Mixta del Campesinado. Este espacio nos va a permitir forjar las bases sólidas de la Reforma Agraria que le permitan al campesinado establecer las rutas, los espacios y los mecanismos que debemos crear para redistribuir la tierra y hacer de Colombia una apuesta justa del campo colombiano, la democratización de la tierra y garantizar la producción de alimentos”, expresó la ministra Carvajalino.

Esta Comisión estará conformada por 54 representantes del campesinado, de los cuales 39 serán escogidos por la Convención Nacional Campesina. La delegación del Gobierno en esta instancia estará a cargo de los ministerios de Agricultura, Hacienda, Interior, Ambiente, Vivienda, Transporte, Igualdad y Cultura. También tendrán asiento el DANE, Prosperidad Social, Agencia Nacional de Tierras y la Agencia de Desarrollo Rural. 

La concertación de las políticas públicas a las que hace referencia esta reglamentación está relacionada con los mecanismos que busquen garantizar derechos de acceso progresivo a la propiedad de la tierra, servicios públicos domiciliarios, protección e intercambio de semillas nativas, fomento de la agroecología, vivienda, mejora de infraestructura rural y extensión agropecuaria, entre otros. 

“Esta norma, contenida en el Plan Nacional de Desarrollo, abrió la voz para que el Gobierno Nacional concertara con las comunidades campesinas ese espacio de diálogo y construcción de la política agropecuaria”, concluyó la ministra.