Por: Juan Niño López

Juan Niño López

La música invade mi mente; aún así, yo no puedo sincronizar con ella ni uno solo de mis músculos, soy incapaz de bailarla. En compensación, la naturaleza me dio la habilidad de dibujar y pintar al ritmo de la luz y la sombra; y todos los nervios y músculos míos se sincronizan perfectamente con “la música” de las líneas, los planos, las atmósferas y los volúmenes, el color y la vida durante la realización de una obra de este arte. Mi mente y mi cuerpo danzan al ritmo de coloridos grafismos.

En el Reporte Mundial sobre Discapacidad del 2011, que es especial por estar prologado por el Profesor Stephen Hawking, la OMS afirma que “La discapacidad forma parte de la condición humana: casi todas las personas sufrirán algún tipo de discapacidad transitoria o permanente en algún momento de su vida, y las que lleguen a la senilidad experimentaran dificultades crecientes de funcionamiento. La discapacidad es compleja, y las intervenciones para superar las desventajas asociadas a ella son múltiples, sistémicas y varían según el contexto”. Dice Hawking que “La discapacidad no debería ser un obstáculo para el éxito. Yo mismo he sufrido una neuropatía motora durante la práctica totalidad de mi vida adulta, y no por ello he dejado de desarrollar una destacada carrera profesional como astrofísico y de tener una feliz vida familiar… Yo he podido beneficiarme de un acceso a atención médica de primera clase, y dependo de un equipo de asistentes personales que hacen posible que viva y trabaje con comodidad y dignidad. Mi casa y mi lugar de trabajo han sido adaptados para que me resulten accesibles. Expertos en computación me han apoyado con un sistema de comunicación asistida y un sintetizador de habla, lo cual me permite preparar conferencias e informes y comunicarlos a audiencias diversas. Pero soy consciente de que he tenido mucha suerte, de muy diversos modos. Mi éxito en la física teórica me ha asegurado el apoyo necesario para vivir una vida digna de ser vivida. Está claro que la mayoría de las personas con discapacidad tienen enormes dificultades para sobrevivir cotidianamente, no digamos ya para encontrar un empleo productivo o para realizarse personalmente… En el informe se destacan los diferentes obstáculos que afrontan las personas con discapacidad (en las actitudes y obstáculos físicos y financieros). Superar esos obstáculos está a nuestro alcance. De hecho, tenemos el deber moral de eliminar los obstáculos a la participación y de invertir fondos y conocimientos suficientes para liberar el inmenso potencial de las personas con discapacidad. Los gobiernos del mundo no pueden seguir pasando por alto a los cientos de millones de personas con discapacidad a quienes se les niega el acceso a la salud, la rehabilitación, el apoyo, la educación y el empleo, y a los que nunca se les ofrece la oportunidad de brillar. En ese informe se formulan recomendaciones para la adopción de medidas a escala local, nacional e internacional. Por consiguiente, será una herramienta inestimable para las instancias normativas, los investigadores, practicantes, defensores de los derechos y los voluntarios relacionados con la discapacidad. Mi esperanza es que, a partir de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, y con la publicación del Informe mundial sobre la discapacidad, este siglo marque un giro hacia la inclusión de las personas con discapacidad en las vidas de sus sociedades”.

Traigo a colación este tema porque deseo resaltar y aplaudir la promesa de la Dra Ilse Lorena Salcedo González de dar atención a parte de la población fusagasuqueña con alguna discapacidad, permitiendo su participación en varios programas de las Escuelas de Formación que hoy inician tareas. Esta promesa de la Secretaria Municipal de Cultura hecha al Dr. Braulio García, Psicólogo Clínico, tiene una trascendental importancia si tenemos en cuenta que en estas Escuelas de Formación se dará una adecuada habilitación de las capacidades compensatorias que presentan las personas con alguna discapacidad. Solo falta pedirle a la Secretaria de Cultura que busque promocionar, efectivamente, las capacidades de sus alumnos y que ellos no sean solamente cifras en los cuadros de informes al Honorable Concejo Municipal durante la próxima sesión de “Control Político”. Si la atención y el servicio a la población en estado de discapacidad se quedan únicamente en las cifras, será otro hecho que todos tendremos que lamentar. Por mi parte, prometo que seré uno de los pocos que haremos seguimiento serio a la Administración Pública en este tema, ya es hora y justo que todos asumamos responsabilidades juiciosas con esta población maltratada.

Para una completa ilustración sobre este tema recomiendo leer el informe antes citado: http://www.who.int/disabilities/world_report/2011/accessible_es.pdf -Me reservo la duda de que alguien lo leerá- Hoy, en Colombia, los más inteligentes leen, máximo, 140 caracteres. Los menos inteligentes leemos más.