Esta iniciativa tiene como objeto declarar un día al año en Bogotá, como el día de la Economía Informal, así, se pretende reivindicar y garantizar el Derecho Constitucional y Fundamental al trabajo para uno de los sectores poblacionales que más ha visto vulnerado su ejercicio debido a la falta de oportunidades laborales en condiciones dignas, esto es, las personas dedicadas al ejercicio de la economía informal.

Para el concejal y precandidato a la Alcaldía por el Polo, Celio Nieves, el derecho al trabajo de las personas no debe reñir con las políticas distritales de recuperación del espacio público, sino que deber organizarlos de manera digna, reubicándolos en lugares aptos para ellos, donde cumplan con todas las normas de salubridad y la ciudadanía tenga acceso a los productos que ellos ofrecen dentro de los términos legales.

De acuerdo con los resultados presentados por el DANE el pasado 31 de enero, en 2018 Bogotá tuvo una tasa de desempleo de 10.5%, igual a los resultados entre enero y diciembre de 2017, ubicándose por encima de la presentada a nivel nacional que fue de 9.7%, lo que indica una ausencia de políticas serias en materia laboral que generen condiciones incluyentes para las familias más necesitadas.

Haciendo un comparativo de los últimos siete años, se evidencia que en el gobierno Peñalosa (2016, 2017 y 2018) 106.000 bogotanos se han quedado sin empleo. Dicha cifra demuestra que la búsqueda de una solución real para ésta problemática no fue priorizada en el Plan de Desarrollo 2016-2020, adoptado a través del Acuerdo 645 de 2016, lo que deriva en que las metas proyectadas no tengan un impacto real en la generación de alternativas de ingreso y empleo de mejor calidad.

En cuanto al número de personas desocupadas, 2018 cerró con 470.000 personas sin empleo en Bogotá, lo que representó una tasa de desocupación de 10.4%.una de las principales causas del creciente aumento de ventas informales en la ciudad.

En este orden de ideas, es claro que la política Distrital en materia de empleo en los últimos años dista de lo que realmente requiere Bogotá, pues para generar alternativas de ingreso se proyectaron 4 metas que pretenden atender a 7.350 vendedores informales, lo que significa escasamente el 4.1% del total de informales que hoy tiene la ciudad (176.000).

A su vez, para el caso de empleo de mejor calidad, el Plan de Desarrollo incluye 3 metas que pueden incidir en sólo 22.750 ciudadanos sin empleo en Bogotá, lo que equivale al 4.8% de las 470.000 personas que en la actualidad no cuentan con trabajo.

Por otro lado, Bogotá aumentó en 2 % la pobreza entre 2015 y 2017 lo que entre otras cosas se atribuyen a la falta de oportunidades de generación de ingresos para las familias bogotanas.

Con informaciones de Caracol Radio