Tras años de abandono, el coliseo San Lorenzo se convierte en un moderno escenario deportivo.

 El Coliseo San Lorenzo, una obra que había permanecido inconclusa desde 2018, ha sido finalmente inaugurado y está al servicio de más de 12.100 habitantes de la localidad. Este proyecto, que representa un importante avance para la comunidad, ha requerido una inversión cercana a los 17 mil millones de pesos, evitando así la pérdida de recursos públicos.

La recuperación del Coliseo San Lorenzo fue posible gracias al trabajo conjunto de la Comisión Regional de Moralización, la Contraloría de Cundinamarca, diversas entidades departamentales y nacionales, además de la Alcaldía de Bojacá. En su primera fase, el proyecto fue declarado inconcluso e incluido en el inventario de obras críticas del Departamento, según la Ley 2020 de 2020. Sin embargo, gracias a la intervención de la Comisión, se evitó que los más de 5.800 millones de pesos invertidos se desperdiciaran.

En 2021, la iniciativa fue reactivada con un esfuerzo colaborativo entre las administraciones municipales y las entidades de control. Esto permitió dar inicio a la segunda fase de la obra, que requirió una inversión adicional de más de 11.200 millones de pesos. El resultado es un moderno coliseo que cuenta con una cancha multifuncional, graderías, camerinos, áreas administrativas, zonas de acceso inclusivo y espacios complementarios, diseñados para fomentar actividades deportivas y recreativas.

El éxito de este proyecto no solo representa una mejora en la infraestructura deportiva de Bojacá, sino que también garantiza un uso eficiente de los recursos públicos y previene el detrimento patrimonial. La Contraloría de Cundinamarca celebra este logro y pone de relieve la importancia del seguimiento y control de los recursos públicos en la consecución de proyectos que benefician a la comunidad.

Con la apertura del Coliseo San Lorenzo, Bojacá da un paso significativo hacia el fomento del deporte y la recreación, creando un espacio accesible y moderno para todos sus ciudadanos. La colaboración entre diferentes entidades y la comunidad ha sido clave para transformar una obra inconclusa en un legado duradero para la localidad.