Recientemente, investigadores de la Facultad de Ciencias “George S. Wise” de la Universidad de Tel Aviv, en Israel, lograron imprimir en 3D un corazón a partir de tejido humano. Incluso las células de este órgano son capaces de palpitar y se contraen, sin embargo aún no son capaces de bombear o latir.
Resulta que hasta el momento, todos los órganos que eran impresos en 3D partían de materiales sintéticos, sin embargo, para hacer este corazón se utilizó el tejido graso de un paciente y lo transformaron en células madre.
Durante la presentación de este avance médico, el equipo de investigadores explicó que el método utilizado les permite imprimir un corazón de cualquier tamaño, pero por lo mientras el órgano que imprimieron no es más grande que una uva.
Para que dimensionemos este logro: es la primera vez que se logra imprimir un corazón completo con vasos sanguíneos, ventrículos, aurículas, etc. Sin embargo, como lo mencionamos anteriormente, aún es necesario “enseñar al órgano” a comportarse como un órgano humano para que sea capaz de madurar y latir.