Tras la manifestación pacífica que se realizó ayer frente a la EPS CAFESALUD en Fusagasugá, indagamos con los usuarios las razones que los llevaron a realizar la protesta. Según ellos, han sido vulnerados los derechos a la salud y a una vida digna, a pacientes con discapacidades. “La IPS MULTIASISTIR nos dejó sin servicios de rehabilitación y enfermería a pacientes domiciliarios”, afirmaron los presentes.
Humberto Mora, yerno de la señora María Luisa González de Aguilar, una paciente que sufre la penosa enfermedad del alzhéimer. “Ha sido una lucha conseguirle hasta los pañales, para lograr que dieran los pañales tocó poner una tutela, el juzgado de Fusagasugá aceptó la tutela y ordenó que dieran los pañales, ahora el problema es con la enfermería porque la enfermería particular es muy costosa y ella necesita de una persona que la atienda permanentemente por su condición… Cafesalud venía prestando el servicio por medio de Multiasistir, pero de un momento a otro ni avisaron ni dijeron nada de que iban a quitar el servicio, por eso estamos solicitando a la secretaría de salud del municipio que nos diga qué ha hablado con Cafesalud, porque yo tuve una entrevista personal con la secretaria y me dijo que hoy mismo quedaba finiquitado y solucionado el tema, que hoy mismo tendríamos un operador que va a prestar los servicios de domiciliarios a las personas”.
El Alzhéimer, es una enfermedad mental progresiva que se caracteriza por una degeneración de las células nerviosas del cerebro y una disminución de la masa cerebral; las manifestaciones básicas son la pérdida de memoria, la desorientación temporal y espacial y el deterioro intelectual y personal. Razones por las cuales, se requiere del cuidado permanente del paciente.
En el año 1993, el Congreso de la República aprobó la tan mencionada Ley 100 en salud. Cuando se creó la ley el sistema de salud colombiano sólo lograba asegurar un 17% de la población, el sistema no contaba con cobertura familiar, es decir que el seguro sólo cubría al trabajador. Su familia accedía a las atenciones de salud a través de las clínicas de las Cajas de Compensación Familiar, las cuales aplicaban unas tarifas módicas, las entidades aseguradoras aplicaban preexistencias, es decir que el afiliado debía renunciar a las prestaciones de salud para aquellas enfermedades existentes al momento de afiliarse, el acceso a los servicios de salud a través de seguros era reducido, los pobres recibían servicios a través de Hospitales Públicos que se financiaban con transferencias de las Direcciones Departamentales de Salud.
Sin embargo, pese a que el espíritu de la Ley era precisamente solucionar esa situación, a la fecha los problemas se siguen presentando en todas las entidades prestadoras de salud del país. Si bien la cobertura ha aumentado al 66%, la falta de eficiencia en el aseguramiento ha ocasionado la crisis actual por la que atraviesa nuestro sistema de salud.
Dicha crisis la evidencian y sufren cada día personas como José Arnovy Pineda, un líder comunal que, pese a que, según el mismo dice lo “conoce todo el mundo”, enfrenta problemas para lograr su atención. Su afiliación es en el régimen subsidiado y la EPS que le debe prestar atención es SaludVida. Hace dos meses aproximadamente sufrió un dolor de cabeza “insoportable” que lo llevó al Hospital San Rafael, “llegando al hospital me sentí peor, no sólo por el dolor de cabeza intenso sino por el trato que nos dan a los pacientes, me pusieron suero y unas inyecciones dentro de la bolsa, yo estaba inhabilitado no me podía ni mover, mi esposa les decía que yo estaba muy mal y ellos le dijeron que eso se me pasaba rápido, que eran por ahí tres días y ya, me dejaron sentado en una silla de ruedas … Nos han tenido con el cuento que dijo el presidente que dizque se acabó el paseo de la muerte y eso es mentira, a mí me han puesto de un lado a otro, primero del hospital me mandaron a sacar la orden en la EPS, la EPS dio la orden para quince días después para que me pudiera atender el neurólogo, cuando llegué a la cita, dijeron que la EPS no había dado la orden, volvimos a la EPS y nos dijeron que era que no había convenio, nos devolvimos otra vez al Hospital con mi esposa y allá nos dijeron que sí había contrato, regresamos a la EPS buscando respuestas y lo que hicieron fue tratarnos mal, allá salió una señora gritando y el celador nos quería sacar a la fuerza, finalmente fue con ayuda de la gente que pagué unos exámenes privados y el diagnóstico es que tengo un tumor en el cerebro… yo no pensé que la gente me fuera a colaborar tanto, ellos son los que han venido a visitarme cuando he estado tan mal que no puedo ni pararme, ellos me han ayudado con mercado y hasta con lo de los servicios, yo les gradezco a ellos que son los que me han ayudado”.
Con el panorama oscuro en su diagnóstico y con la falta de eficiencia en el servicio por parte de la EPS SaludVida, José decidió acudir a tratamientos no convencionales para mitigar el dolor de cabeza que ya no lo dejaba ni caminar. “Yo le voy a decir la verdad, mi dolor de cabeza era insoportable, mi familia de verme así llamaron a un médico alternativo que trabaja por allá con los indios, de Cali para allá adentro, él sabe unas oraciones y yo me sometí a él, y en dos días me pude parar de la cama, era que antes no podía ni comer ni levantarme, se me fue la visión, las manos y pies eran torcidos, pero gracias a Dios y a mi fe, me pude levantar… en este momento estoy de pie con esa medicina alternativa y con la fe en Dios todopoderoso, pero no gracias al sistema de salud que no me dieron sino acetaminofén… igualmente me hacen falta unos exámenes que me negaron, una resonancia magnética de contraste, que ya habían dicho que sí y después dijeron que no me hacían el examen porque al médico le faltó poner una palabra en la orden y que debía empezar todo el paseo otra vez… Yo pasé una tutela y ayer me llamaron que ya me iban a atender, que me iban a tomar todos los exámenes, que el neurólogo me va a sacar la orden otra vez y me van a sacar hasta una campimetría que necesito, ahí vamos a ver”.
En nuestro país existen cientos, miles de José, personas que eligen confiar en tratamientos no convencionales por encima de los tradicionales, personas en cuyo desespero pasan tutelas para exigir lo que debería ser un derecho absoluto, el derecho a la salud y la vida.
Al cierre de esta edición logramos conocer que Cafesalud E.P.S. le giró unos dineros a Multiasistir, a fin de que opere con los usuarios hasta el primero de octubre. Los auxiliares de enfermería serán enviados nuevamente a los sitios donde prestaban el servicio. El lunes definirán si Multiasistir continúa o no, pero la exigencia de la Secretaría de Salud, es que la solución debe ser inmediata.