Bienes por $650 mil millones le expropiaron a los hermanos Mora Urrea presuntos testaferros de las Farc, este lunes, en operativos simultáneos realizados en municipios del Tolima y Cundinamarca.

Por: Vía El Tiempo

En dos operaciones adelantadas de manera paralela por la Fiscalía General de la Nación y con el apoyo del Ejército Nacional, se ubicaron dos familias, la de los Mora Urrea y Chaux González que sirvieron como testaferros de la otrora guerrilla de las Farc.

En 650 mil millones de pesos están avaluados los 60 locales comerciales ubicados en diferentes zonas del país, y que eran parte del emporio de los hermanos Mora Urrea, dueños de los supermercados: Supercundi, Merkandrea y Mercafusa.

A la cadena de supermercados de Norberto, Luis Alirio, Uriel y Edna Janeth Mora Urrea – quienes fueron capturados – se les impuso la medida de extinción del dominio al igual que a 5 sociedades, 70 cuentas bancarias, 7 casalotes, 4 predios rurales, 29 lotes urbanos, 15 apartamentos, 3 casas, 7 locales comerciales y 27 vehículos.

Las actividades se llevaron a cabo en Bogotá y los municipios de Chía, Cota, Fusagasugá, Facatativá, Girardot, La Calera, Madrid, Mosquera, Silvania, Soacha, Tibacuy, Tocainía y Villeta en Cundinamarca; Espinal, Lérida, Melgar y Saldaña en Tolima.

La Fiscalía llega a los “llamados supermercados de la guerrilla” con base en el testimonio de varios desmovilizados, que llevan la investigación a la época de la zona de distinción en el Caguán.

El ente investigador señala que la señora Ana Bertilda Urrea, madre de los implicados, fue muy amiga de Jorge Briceño, alias el Mono Jojoy y que ello facilitó que los hermanos Mora Urrea se prestaran para figurar como dueños de los supermercados y otras propiedades que crecieron de manera inexplicable, lo que llamó la atención de las autoridades.

Es más, la Fiscalía cuenta con el acervo probatoria que advierte que los hermanos Norberto y Luis Alirio visitaban los campamentos de los frentes 51,53 y 55, y de la compañía móvil ‘Abelardo Romero’ de las FARC. 

Los supermercados en su momento sirvieron para bastecer a la guerrilla y lavar el dinero proveniente de actividades ilícitas, para lo cual vendían los productos con un precio muy inferior al del mercado.

Bienes del ‘Negro Acacio’

La otra operación de extinción del dominio se adelantó contra el ciudadano colombo brasilero José Hugo Chaux Cuellar, su esposa Luz Stella González Cuellar y su hijo José Hugo Chaux Gonzalez a quienes se sindica de haberse lucrado de parte del dinero de Tomas Medina Caracas, alias ‘el Negro Acacio’ jefe de las Farc muerto en una operación del Ejército en septiembre de 2007.

‘El Negro Acacio’ era considerado como el gran narcotraficante de las Farc y hasta la fecha no se habían podido ubicar sus bienes. Dentro del proceso de extinción del dominio los bienes fueron avaluados en más de 15 mil millones de pesos.

Entre ellos se cuentan varias casas ubicadas en Bogotá, Villavicencio, Puerto López y Puerto Gaitán en Meta; San José del Guaviare en Guaviare donde se destaca una casa de recreo avaluada en cerca de cinco mil millones de pesos.
Además de varios caballos, campeones en ferias equinas.

Fusagasugá

En esta ciudad los operativos se realizaron al medio día, cuando funcionarios del CTI de la Fiscalía en compañía de militares adscritos al Batallón 39 Sumapaz, se tomaron las sedes de los supermercados SuperCundi y Merca-Todos, y se incautaron de los bienes durante la tarde, indicándoles a los trabajadores que serían llamados a laborar de nuevo tan pronto se aclare la situación.

Fusagasugá Noticias conoció de manera extra oficial que hace apenas quince días los propietarios de los Merca-Todos habían logrado un acuerdo de negocio con la cadena de los supermercados SuperCundi, y que estaban en proceso de transición para la entrega de los bienes, cuando fueron sorprendidos por el operativo de las autoridades.

Mientras tanto en algunos círculos sociales se dice que era un secreto a voces, y que se habían demorado en incautarse de los SuperCundi.

Al término del día muchas personas se agolparon en el centro de la ciudad a observar, y manifestaban el dolor y la preocupación por la cantidad de familias desempleadas en Fusagasugá, en donde afirmaban no hay muchas fuentes de empleo.