Atlántico, Cesar, Nariño, Santander, Antioquia, Valle y Bogotá ya tienen capacidad diagnóstica. Expertos indican que se necesita de los diagnósticos con tanta o mayor urgencia que el propio confinamiento.

El represamiento en las pruebas para detectar el coronavirus tiene alarmado al país.

La Procuraduría General de la Nación afirma que hay más de 11 mil colombianos a la espera de los resultados de la prueba de coronavirus. Unos llevan hasta 20 días sin respuesta del Instituto Nacional de Salud (INS) en Bogotá, a donde fueron remitidas las muestras de secreción de estos pacientes.

El represamiento tiene tal magnitud que el procurador general, Fernando Carrillo, le pidió al Ministerio de Salud explicación del retraso y un informe sobre el proceso de diagnóstico que se adelanta en el país.

“¡Pruebas, pruebas, pruebas!” fue el mensaje que a mediados de marzo envió el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, a los países miembros. No hacer suficientes pruebas, dijo el funcionario, es como combatir un incendio con los ojos vendados.

La llegada de la covid-19 tomó a Colombia sin la preparación necesaria, y el problema desbordó las capacidades de diagnóstico del sistema de salud pública. El INS realizó 30.445 pruebas desde el día en que apareció el virus hasta el 7 de abril. Pero hay que multiplicar rápidamente esa cifra.

Los diagnósticos son procedimientos de biología molecular para encontrar el material genético del coronavirus en muestras de moco o saliva de las personas. La manera óptima de hacerlo es utilizar sistemas automatizados, mediante máquinas que extraen el ARN. Un artefacto de este tipo puede procesar 96 muestras en una hora, y en un día completo puede dar los resultados de más de 2.000 casos.

No obstante, estas máquinas escasean en Colombia. El INS cuenta con una de ellas, en Bogotá, a donde llegaban hasta hace poco las muestras enviadas desde los departamentos. La máquina estuvo dañada durante tres días al finalizar marzo. Por supuesto, el represamiento fue inevitable y desató una polémica acerca de la urgencia de incrementar la estrategia de pruebas.

La biología molecular también puede realizarse de manera manual, y así han comenzado a hacerlo en varios departamentos. Un equipo de tres especialistas en un laboratorio autorizado para hacer las pruebas puede procesar manualmente 24 muestras cada tres horas. En la práctica, este procedimiento analiza en promedio entre 100 y 190 muestras al día. La diferencia con el trabajo automatizado es enorme.

Para responder a la congestión, el INS creó una red de 57 laboratorios asociados en el país, a los cuales está capacitando para realizar las pruebas. Con 40 de ellos ya firmaron convenios y ocho departamentos ya están listos, o casi listos, para considerarse autónomos.

Valle del Cauca se declaró el martes de la semana pasada completamente autosuficiente para procesar pruebas de covid-19 sin enviarlas a Bogotá, gracias a cuatro laboratorios avalados por el INS. En Salud Pública Departamental, el Centro Médico Imbanaco, la Fundación Valle del Lili y la Universidad del Valle procesarán entre 350 y 500 muestras diariamente. La secretaria de Salud, María Cristina Lesmes, aseguró que entregarán los resultados en 12 horas.

En Medellín hacen las pruebas desde el 26 de marzo en tres laboratorios (Salud Pública, EPS Sura y el Instituto Colombiano de Medicina Tropical), y cuatro más están en proceso de certificación para comenzar a hacerlo la próxima semana. Tendrán capacidad para 500 pruebas diarias.

Los entes territoriales reconocen el esfuerzo del INS en atender la emergencia. Hacer 30.445 pruebas en algo más de un mes es una cifra respetable, considerando la poca preparación que tenía el país. Sin embargo, se requiere escalar esa cifra en las semanas que vienen o el confinamiento no habrá servido para nada.

El Gobierno anunció que esta semana llegarán al país un millón de kits de pruebas rápidas, técnicamente llamadas inmunocromatografía. Pero estas tienen el propósito específico de identificar anticuerpos en los pacientes, y su utilidad se limita a personas con más de siete días de presencia del virus. La prueba reina sigue siendo la biología molecular que realizan los laboratorios de la red.

¿QUÉ HA HECHO EL GOBIERNO DE CUNDINAMARCA? 

Mediante Resolución número 970 de 2020, la Gobernación de Cundinamarca asignó 14 mil 800 millones para fortalecer la red pública hospitalaria con el fin de realizar adecuaciones en materia de infraestructura frente a la crisis generada por el covid-19.

Al Hospital San Rafael de Fusagasugá le llegaron 500 millones, y las obras están por terminarse.

Aquí la RESOLUCIÓN 970 

Este es el boletín epidemiológico del 21 de abril  

Con información de SEMANA