Carlos González de Girardot denunció la situación por la que están atravesando cientos de comunicadores en la provincia.   

Carlos Emilio González Portillo, de 70 años, tras 50 ejerciendo el periodismo en el municipio de Girardot, (Cundinamarca), dice estar decepcionado por el absoluto olvido en que el Estado tiene a los comunicadores del territorio nacional, especialmente a los de la provincia.

«Los periodistas en Cundinamarca estamos aguantando hambre», puntualizó en un conversatorio realizado vía Facebook Live por Fusagasugá Noticias Periódico Digital, en donde también participaron los periodistas Francisco López Otero y Alejandro Castro Guerrero, en el programa #LoDinámicoDeLaPolítica, espacio que se viene posicionando entre la audiencia todos los lunes después de las 8:00 de la noche.

González manifestó que no ha podido volver a imprimir su periódico «Cundinamarca al día», el cual lleva más de 30 años en circulación. 

Y señaló que no tiene vivienda propia, que no hay organizaciones que se preocupen por lo que les sucede a los comunicadores.

Por su parte, López Otero del periódico Primer Plano, también se mostró preocupado y sostuvo que muchas veces no se dice nada por orgullo, pero coincidieron en que la pandemia del Covid-19 agudizó la crisis de la prensa regional.

Mientras tanto, Castro Guerrero, fue más allá, exponiendo que existe una especie de «maridaje entre políticos y periodistas». Y se cuestionó, ¿Qué tanto nos vamos a dejar utilizar de los políticos en esta campaña con miras a Congreso de la República?   

Al respecto González dijo que le tiene miedo a los políticos, López y Castro cayeron en la cuenta que los políticos aparecen 6 meses antes de las elecciones con aportes leoninos para poner a su servicio la prensa regional, y luego de ser elegidos no vuelven a responder las llamadas ni entregan informes de sus gestiones.

Castro Guerrero, denunció la doble moral de alcaldes como el de Fusagasugá que posa de libertario, y pone a sus súbditos a bloquear en la red social Facebook a personajes como «El Guasón», por simplemente protestar. Y recordó que a Fusagasugá Noticias no le pautan porque es independiente, señalando que es otra forma de «censura que utilizan las Administraciones Municipales».

Al finalizar, se cuestionaron los millonarios contratos de publicidad a través de intermediarios que manejan desde la Gobernación, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, CAR, y la Empresa de Licores de Cundinamarca, los cuales en su gran mayoría favorecen a empresas y personas de Bogotá, que no tienen nada qué ver con la provincia.

Por: Fusagasugá Noticias